San Andrés de Teixido es un
pueblo cautivador, lleno de misticismo, leyendas y creencias populares que
proceden de los celtas y de los vikingos. Su nombre, Teixido, proviene de los
tejos ("teixos") que había en la zona.
"A SAN ANDRÉS DE TEIXIDO VAI DE MORTO QUEN NON FOI DE VIVO"
Así las almas de los que no fueron ala romería de vivos, se reencarnan en el cuerpo de un lagarto, sapo o culebra, y en tales condiciones, se verán obligados a hacer la romería.
Después de cumplir las promesas
en el santuario, es preciso bajar a la "Fonte do Santo" a la cual se
le consulta sobre si San Andrés concederá o no el favor solicitado. Existen
otros ritos en la romería, como el de bajar más allá de la fuente y cerca de la
orilla del mar buscar la "Herba de namorar", y volver a San Andrés
con el ramo.
Los romeros acostumbran a colgar
del ramo los "Sanandreses" pequeñas figuras de miga de pan,
endurecidas al horno y fermentadas. Las figuras representan símbolos que
tuvieron mucho que ver con la llegada del apóstol a Teixido. Asimismo, en la
ermita, un rincón rebosa de figuras de cera que representan manos, pies,
cabezas, cuerpos enteros, cerdos, vacas.. La ofrenda en cera testimonia la
intercesión milagrosa del apóstol en la curación.